EPOC e impacto emocional: ¿cómo abordar la salud psicológica en los pacientes?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es la tercera causa de muerte en el mundo.

Aunque la mayoría de los pacientes y profesionales de la salud suelen estar atentos a los diversos síntomas que caracterizan esta condición—como tos crónica, dificultad para respirar (disnea), sibilancias y producción excesiva de mucosidad, entre otros—, existe un factor que a menudo no es tenido en cuenta. ¿Cuál? La salud psicológica.

Quienes padecen EPOC tienen un mayor riesgo de sufrir depresión, estrés y ansiedad. No se trata de una cuestión menor, ya que estar deprimido o estresado puede empeorar los síntomas e impactar negativamente sobre la calidad de vida.

En este artículo, analizamos cómo repercute esta dolencia en el aspecto emocional de los pacientes y describimos algunas estrategias para un abordaje psicológico efectivo.

EPOC, una condición que afecta las emociones

Según la ciencia, alrededor del 12% de la población mundial mayor de 40 años está diagnosticada con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica.

Dentro de los síntomas que experimentan quienes atraviesan esta condición, la depresión es uno de los más habituales. Alrededor del 40% de los pacientes presentan síntomas depresivos graves o depresiones clínicas.

De acuerdo con un estudio publicado en BMJ Journals, los síntomas respiratorios, el aislamiento social, el deterioro físico y la pérdida de la calidad de vida serían factores influyentes en la aparición de la depresión en los pacientes con EPOC.

Existen numerosas formas en las cuales la condición impacta negativamente en el estado de ánimo y las emociones de los pacientes:

• Imposibilidad de realizar todas las cosas que solían hacer anteriormente
• Necesidad de ejecutar tareas con mayor lentitud
• Cansancio y dificultades para dormir
• Aislamiento social
• Vergüenza o culpa por sufrir EPOC
• Estrés y temor derivados de los problemas respiratorios

Estos factores hacen que los pacientes se sientan estresados, ansiosos y deprimidos. Su aparición hace que su energía y motivación se agoten, haciendo que no se alimenten, se ejerciten ni duerman de manera adecuada. De esta forma, se genera un círculo nocivo que los va perjudicando cada vez más.

8 recomendaciones para gestionar el estrés y la ansiedad y evitar la depresión

¿Cómo pueden quienes padecen EPOC aliviar el estrés y la ansiedad, y, al mismo tiempo, mantener una actitud positiva que mitigue el riesgo de depresión? 

Poniendo en práctica los siguientes consejos.

• Reconocer qué lugares, situaciones o personas funcionan como disparadores del estrés.
• Evitar las situaciones que causan ansiedad, como espacios demasiado concurridos o con mucho bullicio.
• Practicar ejercicios de relajación, como respiraciones profundas o meditación. Esto ayuda a alejar los pensamientos negativos y a liberar tensiones.
• Pasar tiempo con amigos y familiares, procurando no aislarse de los eventos sociales.
• Evitar asumir demasiadas responsabilidades, ya que hacerlo podría abrumar a los pacientes y causarles más ansiedad.
• Mantener una actitud positiva en diferentes aspectos cotidianos, llevando una dieta saludable, durmiendo la cantidad de horas necesarias y haciendo ejercicios en la medida que la condición lo permita.
• Expresar sus sentimientos y pensamientos con su círculo de confianza.
• Buscar ayuda psicológica para atravesar de manera más amena la enfermedad.

¿Necesitás información adicional acerca del impacto de la EPOC sobre la salud emocional? Entrá en contacto con nosotros.